viernes, 18 de junio de 2010

Separados


Tan distantes. Oculto te encuentras en la profundidad de las aguas, mientras suave murmullo la nostálgica música....

Mis manos, heladas, se estiran buscando el calor de tus manos. Pero las aguas no me dejan encontrarte. Te has perdido, estás lejano, ahogados los momentos dulces que me regalaste.

Me resguardo en el grisáceo cielo de mi mundo secreto, donde mis sentimientos son tan grandes como los mares que has puesto para distanciarnos...

Siento la suavidad de la piel de tu espalda aún presente en la palma de mis manos... Y tu sonrisa... Tu sonrisa poderosa, que cura profundas heridas...

En la orilla de las aguas, te nombro con voz firme y constante... "Regresa... Vuelve..."
No tengo demasiado... sólo dos manos seguras para acariciarte y también para secar tus lágrimas... Y un par de labios que sabrán besarte y sabrán callar... Y dos pies que marcarán dos huellas más en la arena... aparte de tus huellas... Cuando desees caminar y pienses que estás solo...

"Regresa... Vuelve..."... Que como un animalito asustado he escapado cuando me sentí atemorizada... pero ahora te busco entre las sombras, porque no te temo. Invoco todo el poder de los vientos, de la Lluvia, de las nubes, de las tormentas y del cariño que te tengo para que lo entiendas..... Lo siento, no quise lastimarte. Mis sentimientos son verdaderos...

Me parece ver tu rostro reflejado en los brillos de la mar. Vuela mi cabello mientras la mirada se pierde en el infinito... esperando volver a ver tu sonrisa... atesorando en mi corazón tu compañía....
... Regresa... vuelve....


viernes, 11 de junio de 2010

Corazones estrechos....



El egoísmo presente en cada gesto, en cada palabra dicha sin pensar. El personalismo. Tener la oportunidad de construir algo maravilloso con una persona especial, y dejarlo escapar por tener un corazón estrecho...
Esta canción dice muchas cosas. Pero hoy quiero compartirla en mi blog porque me siento un tanto contrariada.
Ver todos los días mujeres que se ilusionan, y hombres que se equivocan y no piden perdón. Mujeres heridas... algo está ocurriendo...
Es hora de valorarnos por lo grandes y poderosas que somos... nosotras damos vida... nosotras les damos la vida a ellos que después se creen con el derecho de agredirnos y ofendernos...
El chancho está mal pelado... la torta mal repartida. Creo que varios tendrán que ponerse a pedir disculpas si llegan a leer esto, y a ver este video.....

lunes, 7 de junio de 2010

Amar o morir!!!


Como el aire necesita limpiarse en las hojas de los árboles. Como la noche necesita de una luna que ilumine los rincones en penumbras dibujando las siluetas en las arenas. Como la mar necesita del viento para crear sus fastuosas olas. Como para que llegue la primavera florecida, se necesita de un otoño marrón. Como necesita el pintor su musa y su pincel. Como el vagabundo necesita la caridad. Como el creyente necesita a Dios, y el ateo necesita de sí mismo... Como la tierra necesita del sol... el humano necesita del amor...

Saber que, al despertar, hay otro ser humano en este planeta que piensa en tí. Saber que alguien eleva una oración para que te vaya bien, o te envía positivas energías para que tus proyectos funcionen. Saber a ciencia cierta que si pretenderlo, estás metido en los pensamientos de otra persona.

Sonreirte a veces con los detalles que se le ocurran para sorprenderte: una llamada inesperada, un mensaje perturbante, un agarrón en público, una propuesta pícara... Un fin de semana solos en un lugar especial. Un simple beso, un simple abrazo.

El amor es el alma de todo. En realidad, todo en el planeta necesita de algo para existir. Somos seres que vivimos gracias a una cadena. Si esa cadena se rompe, algo nos falta... No podemos funcionar como deberíamos.

Dejar de amar... de soñar... de necesitar... dejar de añorar... es comenzar a morir.


Yo, más que nunca, quiero vivir,.. Lamentablemente, tampoco depende siempre de nosotros...

domingo, 6 de junio de 2010

Inalcanzable


Tal como suena la música de las olas del mar rompiendo en las rocas perdidas de la orilla, cada una de tus palabras se me han quedado grabadas en el alma.

Mientras hablabas, una parte de mí hubiese querido volar hacia tus brazos y refugiarse de las amenazas como un pollito helado bajo el ala de su madre. Una parte de mí añoraba la simple caricia cálida de tus manos, el roce de tu piel con la mía en un apretón...

Mientras reías, el pincel de mis ideas trazaba con rapidéz en el lienzo de mi memoria tu figura, a fuego, para no olvidarla hasta que el milagro del encuentro vuelva a ocurrir. Y los tambores de mi corazón eran ahogados por los océanos de mis silencios, porque no era el momento de decir nada... porque era mejor simplemente observarte y disfrutar de tu escurridiza compañía.

De pronto ha mi vida ha llegado un batallón de personas que quisieran solo una mirada de mis ojos.. y no me importa. Porque aquí, sentada a tu lado, sin hacer otra cosa que conversar, siento mi mundo más lleno que si en èl dejara entrar a todas esas personas al mismo tiempo para ocupar mi cama, que sinceramente es el único lugar en el que quieren estar.

Mientras escuchabas atentamente cada intento mío por explicarte mis problemas, mis sentidos estaban alertas a todas tus reacciones, a todos tus movimientos, a todos tus gestos. Evaluando cada una de tus muecas... cada uno de tus guiños... estudiándote completamente. La Leona rodea en la profundidad de la noche, con todos sus sentidos alerta, los desconocidos movimientos de un ser que no conoce y que, sin embargo despierta su curiosidad y su interés, aunque sin dejar de asustarla, porque es desconocido... No sabe a que se enfrenta... Y tiene miedo... Pero el miedo no la paraliza... Y la Leona quiere saber más...

Mientras hablabas mis manos (secretamente) soñaban solo con el roce de tus manos. Y en mi mente, suaves golpeaban las olas del mar rompiendo en las traviesas rocas...

Entre el Gris y el Azul


Pensando en tí, y soñando.
Imaginándote dormido con la mente perdida en alguna nube, volando como un volantín primaveral por los cielos de tus pensamientos...
Queriendo adivinar que es lo que cruza tu cabeza... Si en algunos de esos sueños alguna vez se encuentra mi rostro...

Pensando en tí, y sonriendo...
Mirándote dormido en los rincones de mi imaginación y creando un ambiente para despertarte como nunca pensaste despertar... con el cuerpo lleno de besos, con la piel inundada de caricias, y un impetuoso espíritu avasallador que me somete, me rinde, me domina...

Pensando en tí, y creciendo...
Porque siento que me hace falta ser más mujer para merecerte, más segura, más grande... Y al verte así, tan dormido (en mis pensamientos) me remonto a nuestra primera conversación y a la dulzura de nuestro primer encuentro....

Pensando en tí, y esperando...
Cultivando la paciencia y dominando mis impetuosas ganas de besarte... Queriendo ahogarme en los mares profundos de tus ojos, aunque estén ahora dormidos... Esperando que tengas la necesidad de uno de mis abrazos, de una de mis caricias...

¡Quiero creer!


¿Cómo es tu hombre ideal?... Esa pregunta me la han hecho cientos de veces en los últimos tres meses. Nunca me detuve a pensar en ello...

No estoy segura de que exista un prototipo físico de hombre ideal para mí. Nunca me fijé demasiado en la parte física de la gente. El cuerpo, en la medida del paso de los años, se marchita. Me gusta la idea de cultivar una relación con una persona bellísima espiritualmente hablando.

Un hombre con un buen tema de conversación... De amigable (y sanadora) sonrisa. Porque las sonrisas tienen alto poder curativo. Un hombre luchador, que saque las garras para afirmarse y superar los obstáculos que le va poniendo la vida. Educado, culto, que comparta conmigo el placer de la vida al aire libre, la aventura, y encontrar nuevos rincones en el planeta para hacerlos "nuestros rincones". Un compañero y un amigo, más que una pareja. Un cómplice, un compinche, un partner. Un socio en el negocio de la vida y del amor. Que me pida, y que me dé.

Un hombre que sepa conversar. Que arregle todo conversando. Que no se irrite fácilmente, que tenga paciencia... y que me enseñe a tenerla... Un artista de la vida. Con una fértil imaginación.

Importante es que sea sincero... verdadero... Que repudie la mentira y no la utilice. Los mentirosos jamás serán reamente felices, porque siempre estarán envueltos en sus mentiras. Que no sea zalamero, que no me halague para conseguirme. Que no me ofrezca bajarme la luna y el sol y regalarme el mundo... Que no me ofrezca nada... Así cada momento y cada regalo serán inesperados y los disfrutaré... Que no sea voluble: Si un día me quiere, que me quiera todos los días, pero sobre todo, que me lo demuestre, pues de otra forma no tengo como saber sus sentimientos.

Un hombre detallista, preocupado. Un hombre alegre. Que me contagie su alegría y su positivismo. Que me sacuda cuando me estoy metiendo en el pozo de las tristezas y no me doy cuenta... que me despierte si me duermo en los laureles...

Y en la cama... una bestia llena de pasión. Que desee hacerme sentir mujer tanto como él mismo desea sentirse hombre a mi lado. Que no tenga tapujos ni trancas, y que ame y desee cada centímetro de mí. Que no quiera cambiar ni una de mis arrugas, ni una de mis marcas, y que me acepte tal como soy como la obra más perfecta que él mismo ha modelado (recordemos que es un artista de la vida).

Lo admiraré y respetaré, así que sería genial que me admirara y respetara siempre. Quiero un hombre al que yo mire y me diga en silencio "Cielos, es perfecto"... ¡Aún con sus defectos, quiero que para mí sea perfecto!... Quiero que se equivoque, pero que lo reconozca... Quiero que cometa errores, pero que los superemos... y si hay problemas en la pareja, que asuma su parte de la culpa y sigamos adelante juntos...

Y si ya tiene su vida, y un pasado que lo acompaña... no pretendo cambiarlo. Quiero ser el complemento de la vida que ya ha constuído. No busco un padre para mis hijos, ellos ya tienen uno y nadie cambiará eso... Lo que busco es un compañero para mí: compartir y disfrutar los buenos momentos, socorrer y afirmar en los malos momentos...

La otra mitad de mí. La otra parte del molde. Mi sombra... Mi reflejo en el espejo. Quiero al dueño de la costilla con la que Dios me hizo...

A veces siento que esa persona ha llegado y a veces siento que no. Creo que el tiempo dirá muchas cosas, y llegarán más personas a mi vida...

Algunos dicen que soy demasiado exigente... Yo prefiero pensar que esa persona por ahí anda, buscándome...

¿Existirá?...

La Fría Soledad....


Sola. Se inicia una noche especial para hacer el amor. Una noche fría, densa, cubierta de neblina... de aquellas noches en las que no deseas salir: es mejor guardar el calor en tu cama abrazando a tu compañero...
Pero yo estoy sola.
Y mi cama se siente tan fría como está allá afuera.
No vale la pena mencionar las circunstancias que me han llevado a esta soledad... pero (hoy) me mata. Es una noche tan especial para entregar, para demostrar... Besar, abrazar, acariciar, mirar, respirar, amar y finalmente dormir entrelazada del cuerpo de la persona especial que camina entre las nubes de mi cabeza...

¿Deberé asumir esta soledad? ¿Acostumbrarme a ella?... Me ahoga. Me niego a tener que hacerla mi inseparable compañera de vida.

No fui creada para vivir sola. Quiero un compañero con quien hablar... a quien mirar cuando me comienzo a sentir extraviada... Un compañero para agarrarme si siento que me caeré, pero sobre todo un compañero para reír... para disfrutar... para entregarle todo lo que tengo retenido en el pecho: todo este amor, todas estas ganas de hacer felíz a alguna persona... Quiero amar. De todas esas personas allá afuera me pregunto cuál será la persona especial para mí. Cuales son sus características, cómo la reconoceré.... ¿Existirá?...

Hace tanto frío afuera. Pero aqui, en mi cama.... también hace frío.

En tu cama también debe hacer frío... estás tan solo como estoy yo hoy...

Y estoy sola...
... Mis manos buscan desquiciadas el cuerpo de aquel hombre al lado de mi cuerpo... Reconocer su piel y sus hombros entre medio de la sábana, y no lo encuentran. No hay otra piel que se le parezca... ésa es la piel que mis manos quieren hoy. Mi instinto animal lo busca, lo huele, no lo encuentra... la presa se encuentra lejos. Tan cerca, pero tan lejos a la vez...
Y la leona hambrienta debe retroceder... Hambrienta de caricias, de besos, de entrega, de sonrisas, de miradas penetrantes, de palabras.. de voces sensuales susurrando frases en el oído.... Hambrienta de piel. De hombre.

Y sin embargo... debo abrazar a la soledad... Esta amiga que es fría y no tiene cuerpo. Que clava, por que en lugar de las suaves y cálidas manos que Él tiene, ella tiene filosos y gélidos cuchillos...

Mañana me despertaré con el mismo frío con el que hoy me acuesto. Y me preguntaré lo de todos los días..... ¿Hoy me sentiré amada y deseada? ¿Hoy me sentiré mujer?

martes, 1 de junio de 2010

Sinfonía de Caricias....


Miradas que hablan por sí solas.... Son mis ojos que buscan, en la penumbra de la noche.. tus ojos negros....
Mis manos, pálidas, temborosas y mojadas por el sudor te dibujan: bajando desde la calidéz de tu cuello hasta tus hombros fuertes, aprendiendo con cada una de mis células las formas de tu piel y de tu espalda... Un masaje suave con manos tímidas... con roce de vientre y de piel mientras te me ofreces sentado así, delante de mí, de espaldas.. frágil y confiado.... como una presa débil ante la hambrienta leona que acecha entre los matorrales...
Cada uno de los músculos de tu espalda que se van dibujando ante el paso de mis manos... mis dedos se pasean por los pliegues de tu piel, que ahora suda como la mía... Pero quiero más, tengo hambre y tengo sed de recorrer cada centimetro de esa piel apetecible que me estás ofreciendo: carne y sangre fresca con la que me deseo alimentar... Y vuelvo a tus hombros, los acaricio, los masajeo, los presiono, los memorizo.... y asciendo hasta tu cuello, juntando mis manos y apretando tu cabello negro entre medio de mis dedos...
Tu respiración se agita.. tus ojos se cierran.... tu cuerpo se estremece.... Y desde esa posición mis manos que masajeaban tu espalda se trasladan tímidas hasta tu pecho, mientras mi cuerpo continúa luchando para tomar distancia de tu piel encendida.. casi a punto de perder esta guerra...
Lo estás disfrutando.... Me lo dice el color de tu piel. Me lo dice la temperatura de tu cuerpo...

Sin que lo notes, me libero de mis ropas lila.... Y libres se liberan como dos palomas los dos néctares que te ofrezco para beber...
Tomo tu cabeza con dulzura y te invito a acomodarte frente a mi. Tengo generoso manantial para que calme tu sed. Tus manos creadoras vuelan hacia mi piel, ansiosas, prisioneras, ebrias, enloquecidas...
Beso tus labios esponjosos y húmedos...
... Acaricio ahora tu espalda mientras tu boca se pierde entre mis pechos... y mis dedos bajan despacio por la línea de tu columna....

Mi respiración se confunde con la tuya. Y nuestros sudores se juntan piel a piel.
Ya no hay tiempo. Tenemos urgencia de nosotros.

Porque son mis ojos los que se bañan dentro del vino negro de tus ojos, y se emborrachan con los mostos de tus besos....

Lo que seguía se lo tendrán que imaginar......